Desde siempre, he tenido una pasión por los cuentos que mezclan mundos diferentes, y más aún cuando hay un toque de magia. La inspiración para La Brujita Navideña nació en mí cuando, hace algunos años, fui Au Pair en Vermont. Uno de los recuerdos más dulces que guardo de esa época es leerle a los niños The Cat in the Hat, un libro lleno de ritmo y rimas que encendió en mí el deseo de crear algo similar, pero con una mezcla de mis festividades favoritas: Navidad y Halloween.

Me fascinan los colores, la Navidad y el encanto de las brujas. Así que comencé a imaginar un mundo en el que estos elementos convivieran de manera divertida y única. Fue así como nació Arcoíris, un pueblo donde los colores bailan en el aire y que da vida al espíritu festivo en cada esquina. Brujita, con su estilo único y su valiente corazón, surgió como el personaje ideal para dar vida a esta historia mágica y rítmica que nos invita a celebrar la diversidad.

Crear esta historia fue un proceso especial porque no estaba sola. Xanat ML, mi amiga y colega, aportó su talento en diseño editorial y su habilidad en ilustración para dar forma visual a Brujita, a Pancho y a todos los rincones de Arcoíris. Cada página del libro es un reflejo de nuestro esfuerzo conjunto, de conversaciones sobre los colores que mejor transmitían el mensaje y de cómo queríamos que cada ilustración contara su propia historia.

La Brujita Navideña es un libro en el que puse mi amor por las palabras y mi deseo de crear un mundo donde los pequeños lectores se sientan inspirados a ser ellos mismos. Con rimas y juegos de palabras, cada página está pensada para resonar en los corazones de niños y adultos, recordándonos que la Navidad no es solo un día, sino un sentimiento de aceptación y alegría.