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Después del último post que escribí; Steampunk, tecnología con vapor, me enteré de que la película Máquinas Mortales pertenecía a esta variante del cyberpunk. Decidí ver la cinta y aunque fue duramente criticada puedo decir que para mí estuvo… bien.
Creo que le faltó desarrollo de la historia y eso hizo que no se sintiera verosímil. Con esto me refiero que por falta de tiempo el enamoramiento de los personajes principales no se percibió de manera real. De la misma forma pasa cuando nos relatan la historia de Hester Shaw, nuestra heroína. Ella es separada trágicamente de su madre y posteriormente cae en la protección de un cyborg que al verla triste desea hacerla igual a él, para que ya no sienta más. Obviamente ella escapa porque desea seguir siendo humana. Esta pequeña historia fue tan fugaz que no me dejo sentir el dolor del cyborg al perderla.
Quiero pensar que el libro de Philip Reeve es más detallado y me imagino que puedes empatizar de forma profunda con los personajes.
El director de la cinta Christian Rivers se enamoró por completo de la saga, tanto que compró todos los derechos. Su idea era transformar las obras en películas. Él tiene premios como Oscar y BAFTA a los mejores efectos visuales y está cinta requería de una gran experiencia en esa área. Y con asombro puedo decir que los efectos especiales son extremadamente buenos, pero como no tuvo buena aceptación en la taquilla, sólo se quedó con la primera cinta.
Otro punto en contra es que los actores no eran conocidos, no se le hizo la publicidad necesaria para generar audiencia. Sabemos que el cine de entretenimiento tiene sus reglas y si no existe suficiente publicidad o los actores son vagamente conocidos no tendrás el resultado esperado.
Los vestuarios son dignos del steampunk, un pasado combinado con el futuro. Elegantes, estrafalarios, funcionales dentro de este mundo post-apocalíptico.
Espero que con este dato te den ganas de leer el libro. Nuestra heroína es descrita sin un ojo y casi sin nariz. En el film fue reducida sólo a una cicatriz. Puedo decir que lo feo no vende. En mi caso me encantaría tener una heroína sin apariencia hermosa.
¿Tú qué opinas?
Después del último post que escribí; Steampunk, tecnología con vapor, me enteré de que la película Máquinas Mortales pertenecía a esta variante del cyberpunk. Decidí ver la cinta y aunque fue duramente criticada puedo decir que para mí estuvo… bien.
Creo que le faltó desarrollo de la historia y eso hizo que no se sintiera verosímil. Con esto me refiero que por falta de tiempo el enamoramiento de los personajes principales no se percibió de manera real. De la misma forma pasa cuando nos relatan la historia de Hester Shaw, nuestra heroína. Ella es separada trágicamente de su madre y posteriormente cae en la protección de un cyborg que al verla triste desea hacerla igual a él, para que ya no sienta más. Obviamente ella escapa porque desea seguir siendo humana. Esta pequeña historia fue tan fugaz que no me dejo sentir el dolor del cyborg al perderla.
Quiero pensar que el libro de Philip Reeve es más detallado y me imagino que puedes empatizar de forma profunda con los personajes.
El director de la cinta Christian Rivers se enamoró por completo de la saga, tanto que compró todos los derechos. Su idea era transformar las obras en películas. Él tiene premios como Oscar y BAFTA a los mejores efectos visuales y está cinta requería de una gran experiencia en esa área. Y con asombro puedo decir que los efectos especiales son extremadamente buenos, pero como no tuvo buena aceptación en la taquilla, sólo se quedó con la primera cinta.
Otro punto en contra es que los actores no eran conocidos, no se le hizo la publicidad necesaria para generar audiencia. Sabemos que el cine de entretenimiento tiene sus reglas y si no existe suficiente publicidad o los actores son vagamente conocidos no tendrás el resultado esperado.
Los vestuarios son dignos del steampunk, un pasado combinado con el futuro. Elegantes, estrafalarios, funcionales dentro de este mundo post-apocalíptico.
Espero que con este dato te den ganas de leer el libro. Nuestra heroína es descrita sin un ojo y casi sin nariz. En el film fue reducida sólo a una cicatriz. Puedo decir que lo feo no vende. En mi caso me encantaría tener una heroína sin apariencia hermosa.
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