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Te comparto que estaba terminando de hacer la investigación de la fantasía, y obviamente tenía que hacer la revisión de la fantasía en México, desgraciadamente como pasa también con la ciencia ficción, es casi nula.
Estuve leyendo un artículo de la UNAM, revista digital, que tenía por título El velo pintado: ¿Por qué no se puede escribir literatura fantástica en México? y empezaba con la frase Juan Villoro Acuño que decía; “En México es imposible ser…” y en el caso de Óscar Luviano escritor del artículo dijo; “En México es imposible ser escritor de literatura fantástica”.
Esta frase tan tétrica, es cierta. En México son casi nulos los autores de fantasía, y las autoras de fantasía ¡ni se diga! Aquellos que tratan de crear estas historias son fuertemente criticados, porque no creen que sea literatura. Muchos de ellos dicen que la literatura fantástica mexicana es mala. Lo que yo pude deducir es que hay mucho malinchismo en nuestro país. Porque al final la literatura fantástica extrajera se vende por montones, como: Harry Potter y el clásico, El señor de los anillos.
Otro aspecto importante es la apabullante realidad mexicana, donde el crimen, la política, los narcos etc…, hacen que la mayoría de las historias sean de estos temas (realistas), porque los autores desean transmitir su preocupación y opinión, imaginar mundos fantásticos queda fuera de los límites. En el caso de los países de primer mundo hay muchas cosas resultas dentro de su sociedad y es más factible dejarse llevar por estas historias, sin embargo, la literatura fantástica siempre tiene un trasfondo.
Esta oración que se escribe dentro del artículo me hizo mucho sentido, porque a mí me la han dicho “¿De cuál fumaste?, se acusa a quien se atreve a pronunciarse fuera de los límites impuestos por las imágenes permitidas” quiere decir que se si deseas escribir tiene que ser dentro de los límites que te piden las editoriales y aquellos críticos que dictan cuál es la literatura verdadera.
Entonces, este malinchismo nos prohíbe pensar en la posibilidad de crear fantasía mexicana, como dice este artículo “el editor promedio repela, con ese cinismo de villano de telenovela que caracteriza a quien se sabe con el divino poder de hacer y deshacer carreras (jaja): “Sí, todos son libros de literatura fantástica, pero no escrita por ñeros”. Eso me hace pensar que minimizamos nuestra propia cultura, porque sí existen monstruos fantásticos dentro de nuestra mitología, pero no se cree que sea tan impresionante como la europea.
Y, si llegamos a escribir de monstruos europeos se dice: “¡cómo puedes escribir de eso, esa no es nuestra cultura!”, entonces no los tenemos contentos con nada. Al final creo que estamos en un mundo globalizado, en donde las culturas se mezclan, por qué no tomar de todo lo que nos rodea, olvidarnos de esos críticos y escribir lo que deseamos transmitir con nuestro corazón.
Sin embargo, la mitología mexicana es rica en creaciones fantásticas. Hace poco encontré un autor llamado Ramón Valdés Elizondo que me encantó, porque habla de la mitología mexicana y lo hace ver tan increíble como cualquier otra mitología, tan es así que muchos autores desearían escribir de la serpiente emplumada. Su saga se llama Flor Negra, la iré a comprar en cuanto pueda, porque me gustaría escuchar la voz fantástica de un autor mexicano.
Desgraciadamente en el artículo que estaba leyendo decía que la literatura fantástica mexicana: “Es la que nunca entra en las listas de los más vendidos de Sanborns (no cabe ni en Ficción/No Ficción, y mucho menos en Bestsellers, y apesta a evasión de lo mexicano que como sabemos es la única posibilidad de lo real).”
Pon ende, existe una falta de difusión de la literatura fantástica mexicana, primero porque tenemos muy pocos lectores y dos porque las editoriales no están dispuestas a perder la poca entrada de dinero y aunque muchos no deseamos pensar en el dinero, seamos sinceros, sin el dinero no se cubren las necesidades básicas.
Perdemos de vista que la fantasía va mucho más allá que sólo un mundo imaginario. La fantasía nos permite conectar con nuestras emociones y comprendernos a nosotros mismos de forma más profunda. Nos ayuda a enfrentarnos a nuestros miedos y ansiedades, e incluso puede inspirarnos para cambiar nuestra vida. En una sociedad en la que la violencia está muy extendida y a menudo se glorifica, es crucial que los niños tengan acceso a libros que promuevan valores como la empatía, la lealtad, la perseverancia, la fortaleza etc. El mundo de la fantasía puede ofrecer esperanza y un futuro más brillante.
Si quieres saber más te invito a leer ¿Qué es la literatura fantástica y cuáles son sus características?
No es de extrañar que muchos cuentos clásicos como Las Crónicas de Narnia sigan siendo disfrutados por lectores de todas las edades. Estas historias son más que un mero entretenimiento; son poderosas herramientas para la educación y el crecimiento.
El otro día estaba pensando en nuestro Dragón y me dirás: "¿Tenemos dragones mexicanos?" pues al escuchar a Ramón Valdés que describe a la Serpiente Emplumada como un dragón, me gusta pensar que es cierto y al final la literatura se trata de transformar algo existente en algo fantástico. De hecho, de esa idea nació el título de mi próximo cuento; El dragón que nunca debió existir en el cual haré referencia a toda esta negación de la fantasía, sin embargo el dragón esta ahí escondido esperando a ser descubierto. La fantasía esta en todos lados, esperando a ser descubierta.
Gracias por leer este artículo si te gustó inscríbete a mi página y comparte esta información. Hay muchas creaciones fantásticas mexicanas, únicas e inigualables escondidas entre las cenizas del tiempo, esperando a ser descubiertas por cualquiera que tenga una mente abierta.
Te comparto que estaba terminando de hacer la investigación de la fantasía, y obviamente tenía que hacer la revisión de la fantasía en México, desgraciadamente como pasa también con la ciencia ficción, es casi nula.
Estuve leyendo un artículo de la UNAM, revista digital, que tenía por título El velo pintado: ¿Por qué no se puede escribir literatura fantástica en México? y empezaba con la frase Juan Villoro Acuño que decía; “En México es imposible ser…” y en el caso de Óscar Luviano escritor del artículo dijo; “En México es imposible ser escritor de literatura fantástica”.
Esta frase tan tétrica, es cierta. En México son casi nulos los autores de fantasía, y las autoras de fantasía ¡ni se diga! Aquellos que tratan de crear estas historias son fuertemente criticados, porque no creen que sea literatura. Muchos de ellos dicen que la literatura fantástica mexicana es mala. Lo que yo pude deducir es que hay mucho malinchismo en nuestro país. Porque al final la literatura fantástica extrajera se vende por montones, como: Harry Potter y el clásico, El señor de los anillos.
Otro aspecto importante es la apabullante realidad mexicana, donde el crimen, la política, los narcos etc…, hacen que la mayoría de las historias sean de estos temas (realistas), porque los autores desean transmitir su preocupación y opinión, imaginar mundos fantásticos queda fuera de los límites. En el caso de los países de primer mundo hay muchas cosas resultas dentro de su sociedad y es más factible dejarse llevar por estas historias, sin embargo, la literatura fantástica siempre tiene un trasfondo.
Esta oración que se escribe dentro del artículo me hizo mucho sentido, porque a mí me la han dicho “¿De cuál fumaste?, se acusa a quien se atreve a pronunciarse fuera de los límites impuestos por las imágenes permitidas” quiere decir que se si deseas escribir tiene que ser dentro de los límites que te piden las editoriales y aquellos críticos que dictan cuál es la literatura verdadera.
Entonces, este malinchismo nos prohíbe pensar en la posibilidad de crear fantasía mexicana, como dice este artículo “el editor promedio repela, con ese cinismo de villano de telenovela que caracteriza a quien se sabe con el divino poder de hacer y deshacer carreras (jaja): “Sí, todos son libros de literatura fantástica, pero no escrita por ñeros”. Eso me hace pensar que minimizamos nuestra propia cultura, porque sí existen monstruos fantásticos dentro de nuestra mitología, pero no se cree que sea tan impresionante como la europea.
Y, si llegamos a escribir de monstruos europeos se dice: “¡cómo puedes escribir de eso, esa no es nuestra cultura!”, entonces no los tenemos contentos con nada. Al final creo que estamos en un mundo globalizado, en donde las culturas se mezclan, por qué no tomar de todo lo que nos rodea, olvidarnos de esos críticos y escribir lo que deseamos transmitir con nuestro corazón.
Sin embargo, la mitología mexicana es rica en creaciones fantásticas. Hace poco encontré un autor llamado Ramón Valdés Elizondo que me encantó, porque habla de la mitología mexicana y lo hace ver tan increíble como cualquier otra mitología, tan es así que muchos autores desearían escribir de la serpiente emplumada. Su saga se llama Flor Negra, la iré a comprar en cuanto pueda, porque me gustaría escuchar la voz fantástica de un autor mexicano.
Desgraciadamente en el artículo que estaba leyendo decía que la literatura fantástica mexicana: “Es la que nunca entra en las listas de los más vendidos de Sanborns (no cabe ni en Ficción/No Ficción, y mucho menos en Bestsellers, y apesta a evasión de lo mexicano que como sabemos es la única posibilidad de lo real).”
Pon ende, existe una falta de difusión de la literatura fantástica mexicana, primero porque tenemos muy pocos lectores y dos porque las editoriales no están dispuestas a perder la poca entrada de dinero y aunque muchos no deseamos pensar en el dinero, seamos sinceros, sin el dinero no se cubren las necesidades básicas.
Perdemos de vista que la fantasía va mucho más allá que sólo un mundo imaginario. La fantasía nos permite conectar con nuestras emociones y comprendernos a nosotros mismos de forma más profunda. Nos ayuda a enfrentarnos a nuestros miedos y ansiedades, e incluso puede inspirarnos para cambiar nuestra vida. En una sociedad en la que la violencia está muy extendida y a menudo se glorifica, es crucial que los niños tengan acceso a libros que promuevan valores como la empatía, la lealtad, la perseverancia, la fortaleza etc. El mundo de la fantasía puede ofrecer esperanza y un futuro más brillante.
Si quieres saber más te invito a leer ¿Qué es la literatura fantástica y cuáles son sus características?
No es de extrañar que muchos cuentos clásicos como Las Crónicas de Narnia sigan siendo disfrutados por lectores de todas las edades. Estas historias son más que un mero entretenimiento; son poderosas herramientas para la educación y el crecimiento.
El otro día estaba pensando en nuestro Dragón y me dirás: "¿Tenemos dragones mexicanos?" pues al escuchar a Ramón Valdés que describe a la Serpiente Emplumada como un dragón, me gusta pensar que es cierto y al final la literatura se trata de transformar algo existente en algo fantástico. De hecho, de esa idea nació el título de mi próximo cuento; El dragón que nunca debió existir en el cual haré referencia a toda esta negación de la fantasía, sin embargo el dragón esta ahí escondido esperando a ser descubierto. La fantasía esta en todos lados, esperando a ser descubierta.
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